man-272675_1280-300x200 Compañeros de trabajo negativos

Compañeros de trabajo negativos

Compañeros de trabajo negativos debilitan a todos a su alrededor. Te ha pasado alguna vez, que fuiste a una casa y estar allí te hizo sentir de una manera incómoda, te empezaron a correr las prisas y ganas de irte, a tal punto que hasta no salir de ese lugar realmente no estuviste tranquilo. A mí, sí, me ha pasado, y vaya, que se siente hasta mala vibra.

Traigo este tema a colación, porque en los lugares de trabajo por lo general de espacios abiertos, solemos contagiarnos de la energía del otro.

Es decir, si están en un modo positivo y entusiasta, todos los que llegan o permanecen en este ambiente se sienten más dichosos, trabajan con alegría y animan a sus equipos a seguir el ritmo.

La actitud moldea su día

Parece mentira que ciertos comportamientos, cambien, controlen y paralicen las dinámicas de conductas de los individuos. Dependiendo del lugar de trabajo, se verán dinámicas diferentes.

Por ejemplo, estuve trabajando en una empresa del mercado de capitales hace mucho tiempo. Recuerdo que el escándalo y bullicio se escuchaba en la sala de operaciones, donde se planteaban compra/venta de renta variable o fija.

Sin embargo, al movilizarse y llegar al departamento de contabilidad sentías que estabas entrando a un monasterio. De estos lugares de monjes que pagan votos de silencio. Aquello era el ensordecedor del silencio, todos concentrados, nadie levantaba la mirada, era alucinante.

Contagiar lo negativo

Así como se contagia el silencio o el bullicio, podemos encontrar que las actitudes también. Una actitud negativa podrá traspasar fronteras tan inquebrantables como el carácter de otro ser humano.

Es decir, tú puedes ser muy buen compañero de trabajo, colega, supervisor o líder. Pero cuando en el equipo encuentras uno solo de tus miembros, con actitud negativa; lo siento, pero como dicen en ventas, te quema al equipo.

Si, lo quema, lo hace trizas, añicos, pedacitos, porque les roba la energía positiva, el entusiasmo, la motivación de salir a comerse al mundo.

Si tú tienes a alguien así, por favor, trata de ayudarle a cambiar, pero si no pasa nada, sácalo de tu equipo. No necesitas gente así, tienes que buscar a los mejores a gente entusiasta, motivada, positiva y que crea en lo que hace.

Ya lo decía Dale Carnegie, “Usted se baña todos los días, la motivación es igual, úsela todos los días”.

La gente negativa debilita a tu equipo de trabajo, la mente de tus colegas. Los pone contra el suelo y les hace sentir que nada de lo que hacen vale la pena.

Napoleón Hill lo dice en su libro “Piense y hágase rico”, busque a las mentes maestras, reúnase con ellas y verá cómo alcanzará el éxito.

Esas mentes maestras son personas alineadas en el mismo pensamiento positivo que tú. Ellos ven en la vida una oportunidad, que cada día para ellos es una aventura llena de la más grande y majestuosa esperanza de vivirlo.

Recordemos también, que el refrán popular dice: “Todo es según del color del cristal con que se mira”.

Si tú cristal es negro, el panorama será negro, pero si es transparente, se verá nítido. Todo depende de ti y de que no te debiliten los negativos.

“Realiza cada una de tus acciones como si fuera la última de tu vida”

Marco Aurelio