El profesional que quiero ser
¿Sabías que todos los profesionales pasamos alguna vez o muchas veces por miedos, dolor, días interminables de lucha y de tránsito quizás sin sentido?
Y tú dirás, entonces, ¿Por qué sigues allí?
Porque si ser profesional, crees que es estar sumergido en el conformismo, satisfacción de corto plazo. Alegría por un sueldito.
Trabajar cada día en algo que te parece insignificante y con altas dosis de aburrimiento. Entonces, tú no eres el profesional que están buscando las empresas adecuadas.
Estamos en una época diferente. En un momento definitivo. Un cambio que se ha acelerado con la llegada de la tecnología. Está aquí, lo estamos viviendo y hay que adaptarse.
Mira como lo ha hecho Ricardo Lop, él pasó de “andar en su tractor por ahí”. A ser un comerciante virtual.
Lo que ha hecho un taxista para ser diferente y hacer crecer su negocio, ¿conoces a Rixar García (taxi Oviedo)? Él es el primer taxi social del mundo.
O si quieres, aprende de Bere Casillas, que decidió dejar de ser el sastre oculto en su taller para darse a conocer al mundo a través de la web.
Ellos son ejemplos de este cambio y de su adaptación al mismo. Otros profesionales como Ximo Salas con sus recursos humanos 2.0.
Yola Castillo que te dice cómo mantenerte soñando y trabajando por ello, Alfonso Alcántara que te da orientación con glamour y habla de empleo 2.0.
¿Qué tienen ellos que no tengas tú?
Quizás cambiaron de perspectiva y decidieron pasar a ser parte de la “era del talentismo”.
Estuvimos viviendo en un momento de la historia que ha cambiado. Así como pasamos del feudalismo a la industrialización. Hemos llegado a otro momento importante de la historia de la humanidad.
Y es mejor que lo aceptemos lo antes posible, para comenzar nuestra propia adaptación. Creíamos ser felices en un punto de la historia donde la esclavitud empresarial era la única forma de ser felices.
O nunca mejor dicho, las famosas palabras de padres y abuelos: “estudia, estudia, hazte de una carrera profesional para que puedas tener un trabajo para toda la vida”.
Ahora, necesitamos ser útiles a nosotros mismos y a los demás. Demostrar, actuar sin cesar, pensar en lo realmente importante.
Vivir y dar un aporte diferente a las personas que nos rodean. Ya sea, a través, de nuestros servicios o por qué no, de nuestros productos.
Somos fuertes los profesionales ahora
Somos fuertes los profesionales ahora y muy capaces. Porque en lugar de demostrar que somos mejor.
Demostramos nuestras capacidades y lo que el mundo necesita que nosotros podemos aportar. Aunque al principio es difícil. Lo tomamos con calma porque cuando creemos en nosotros mismos cambiamos la realidad y el comportamiento de quienes nos rodean.
Tú y yo seguro que alguna vez nos hemos derrumbado ante la declaración fiscal ¿a qué si?
Y, sin embargo, pensamos, bueno el próximo año irá mejor. Porque creemos en nuestra capacidad. Debemos confiar en nuestro talento y guiarlo para que siempre, esa fuerza creadora que tenemos nos lleve a consolidar nuestros conocimientos. Para seguir aportando lo mejor.
La mayoría de las personas dejan que aquello que es importante en sus vidas profesionales, vaya pasando a segundo plano.
Hasta el punto de olvidarlo para siempre, sin pensar, en que las cosas comunes no tienen repercusión.
Así es como se desintegran los sueños, las ilusiones, los ideales, hasta que parece haber un pozo seco en su existencia.
El profesional adaptado a su tiempo y momento. Se dice, “aunque se presenten momentos difíciles en mi vida, tengo que encontrar siempre la forma de avanzar.”
El optimismo es clave en estos tiempos.
La acción sumada a dos factores claves, optimismo y perseverancia. Hacen que quien lo desee fervientemente logré sus objetivos profesionales.
Si nos comprometemos con nuestros propósitos y sueños. Dejándonos llevar por la pasión del cambio, seremos capaces de llevar nuestros caminos por donde queremos.
Tú no tienes que intentar controlarlo todo, sólo especializarte. Haz lo que quieres de verdad, vive sin miedo. Tú lema debe será: el profesional que quiero ser.
Te dejo 6 pautas a seguir para encontrar el disfrute en cada instante de tu trabajo:
1.- Cree en ti.
2.- Apaga la voz negativa en tu cabeza y enciende la voz positiva.
4.- Vive el momento.
5.- Toma un respiro para agradecer y felicitarte por todo lo que haces día a día.
6.- No te detengas en el primer logro, sigue luchando por tu próxima meta.